Caso de material de abuso sexual infantil en Red Oscura de ICE HSI conduce a 5 años en prisión federal para hombre de Connecticut
NEW HAVEN — Un nombre de Connecticut fue condenado el 8 de junio en un tribunal federal a cinco años en prisión federal y cinco años de libertad supervisada por poseer material de abuso sexual infantil, tras su condena en una investigación de la ‘Red Oscura’ dirigida por la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés) del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) en New Haven, Connecticut.
Este operativo de ICE HSI encabezado por agentes especiales en New Haven, Connecticut reveló que Michael Hull, 61, de Shelton, Connecticut estaba accediendo la Red Oscura para buscar, ver y descargar material de abuso sexual infantil. En mayo de 2017, agentes de ICE HSI y oficiales de policía de Shelton, Connecticut efectuaron un registro autorizado por el tribunal de la residencia de Hull en Connecticut e incautaron aproximadamente 16 dispositivos electrónicos, incluyendo computadoras y discos duros externos. Análisis forenses de los dispositivos incautados revelaron 13 imágenes y 126 videos de material de abuso sexual infantil, incluyendo muchas imágenes y videos mostrando a niños menores de 12 años participando en conducta sexualmente explícita. Entre los artículos incautados también se encontraban dos tabletas cifradas y un disco duro cifrado que no pudieron ser registrados.
La investigación de ICE HSI también reveló que Hull tenía una cámara de video instalada en su baño. La cámara estaba conectada a una videocasetera que capturaba imágenes de individuos, incluyendo niños, que utilizaban su baño. Agentes localizaron e incautaron varias videocasetes que contenían estas grabaciones en el hogar.
Hull había permanecido detenido desde su arresto el 31 de mayo de 2017. En enero de 2018, él se declaró culpable de un cargo de recibir material de abuso sexual infantil. Como parte de la pena, el juez también ordenó a Hull a pagar una multa de restitución de $5,000, la cual será utilizada para financiar servicios para víctimas, de conformidad con la Ley de Justicia para Víctimas de Trata de 2015.
Este caso fue investigado por ICE HSI New Haven, parte de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional en Boston; por el Departamento de Policía de Shelton, Connecticut y por el Equipo de Trabajo contra la Explotación Infantil de Connecticut, el cual incluye agencias del orden público federales, estatales y locales. El caso fue procesado por la oficina de John H. Durham, fiscal federal para el distrito de Connecticut.
Esta investigación fue realizada bajo la Operación Depredador de ICE HSI, una iniciativa internacional para proteger a menores de depredadores sexuales. Desde el lanzamiento de la Operación Depredador en 2003, ICE HSI ha arrestado a más de 16,000 individuos por delitos contra menores, incluyendo la producción y distribución de material de abuso sexual infantil en línea, viajar al extranjero para tener relaciones sexuales con menores y tráfico sexual de niños. En el año fiscal 2017, más de 2,700 depredadores de niños fueron arrestados por agentes especiales de ICE HSI bajo dicha iniciativa y más de 900 víctimas fueron identificadas o rescatadas.
ICE HSI le exhorta al público que denuncie presuntos depredadores de menores y cualquier actividad sospechosa mediante su Línea para Pistas gratuita al 1-866-DHS-2-ICE o completando su formulario para pistas en línea. Ambos son manejados por investigadores en todo momento. Si se encuentra fuera de los Estados Unidos o Canadá, debe llamar al 802-872-6199. Usuarios con deficiencias auditivas pueden llamar TTY 802-872-6196.
Presunta explotación sexual de menores o niños desaparecidos también pueden denunciarse o reportarse al Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados, un asociado de la Operación Depredador, mediante su línea gratuita 1-800-THE-LOST las 24 horas al día.
ICE HSI es un miembro fundador del Equipo de Trabajo Global Virtual, una alianza internacional de agencias del orden público y asociados en el sector privado que trabajan juntos para prevenir y disuadir la explotación de menores en línea.