SEATTLE — Más de 460,000 mascarillas quirúrgicas N95 de 3M falsificadas destinadas para ser utilizadas por personal de primera intervención en la región del Estrecho de Puget (Puget Sound, en inglés) fueron incautadas el miércoles por el Equipo de Trabajo de Seguridad Fronteriza (BEST, por sus siglas en inglés) de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés), la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. (CBP, por sus siglas en inglés) y la FBI.
"Las mascarillas quirúrgicas falsificadas son una amenaza seria para el personal de primera línea que dependen de ellas mientras combaten valientemente esta pandemia. El garantizar la integridad de la cadena de suministros de equipo de protección personal (PPE, por sus siglas en inglés) es de suma importancia", dijo el agente especial encargado Robert Hammer, quien supervisa las operaciones de HSI en la región del noroeste del Pacífico. "HSI Seattle está colaborando activamente con nuestros socios del orden público para combatir el tráfico de PPE falsificado. Las incautaciones de hoy demuestran nuestro compromiso con perseguir a cualquiera que pone las vidas y la salud de la gente en peligro sólo para obtener ganancias ilícitas".
HSI, la CBP y FBI trabajan juntas para prevenir que productos no autorizados y falsificados alcancen a los consumidores estadounidenses.
"Organizaciones criminales están explotando la pandemia del COVID-19 al venderles equipo de protección personal falsificado a consumidores estadounidenses desprevenidos", dijo Brian Humphrey, director de operaciones de campo para CBP en Seattle. "En conjunto con nuestros socios del orden público, los hombres y mujeres vigilantes de la CBP están trabajando las 24 horas al día, 7 días a la semana para mantener a estos productos ilegales y no seguros fuera de los hospitales y hogares de nuestra nación".
La incautación de estas mascarillas quirúrgicas falsificadas no sólo garantiza la salud y seguridad de trabajadores de atención médica de primera línea al prevenir que ellos reciban equipo de protección personal inferior, sino también protege la integridad de la economía estadounidense.
Donald M. Voiret, agente especial encargado del despacho de campo de Seattle de la FBI, dijo: "Durante una época en la cual dependemos de mascarillas y otro equipo de protección personal para proteger a nuestro personal de primera intervención, proveedores de atención médica y miembros del público, es desalentador que estos artículos puedan ser fraudulentos algunas veces. Estamos agradecidos por nuestras alianzas del orden público para remover a estos productos de distribución. La FBI les exhorta a todos a ejercer la diligencia debida y tomar precauciones cuando sea apropiado al interactuar con vendedores e intermediarios desconocidos en la cadena de suministros".
Esta incautación de mascarillas quirúrgicas N95 de 3M falsificadas tiene un precio de venta al público recomendado por el fabricante (MSRP, por sus siglas en inglés) de aproximadamente $587,000. Sin embargo, existen instancias reportadas en las cuales organizaciones víctimas han pagado cantidades elevadas en dólares por encima del MSRP para obtener mascarillas y otras modalidades de PPE.
BEST identificó a siete posibles organizaciones víctimas que compraron las mascarillas 3M falsificadas. Se les ha notificado a todas las posibles organizaciones víctimas para prevenir que PPE falsificado sea distribuido a personal de primera línea.
Agentes especiales de HSI determinaron que las mascarillas eran falsificadas luego de trabajar con el Centro Nacional de Coordinación de Derechos de Propiedad Intelectual y la empresa 3M.
Las posibles violaciones criminales varían entre contrabando, tráfico de mercancías falsificadas, fraude electrónico, lavado de activos, robo o fraude en conexión con programas gubernamentales y manipulación de precios.
Un número de agencias miembro y socios de BEST ofrecieron apoyo crítico a esta operación, incluyendo: la CBP, la FBI, la Oficina del Inspector General (OIG, por sus siglas en inglés) del Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU. (DHS, por sus siglas en inglés), la OIG de la Administración de Servicios Generales, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU., la OIG del Departamento de Salud y Servicios Sociales, la Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de Infraestructura del DHS, el Departamento de Policía de Seattle y la Oficina de Administración de Emergencias del Condado de King.
HSI de la región del noroeste del Pacífico está participando activamente en un esfuerzo a nivel nacional para combatir el tráfico de PPE falsificado.
Esfuerzo nacional
En las últimas semanas, HSI ha efectuado acciones policiales a través del país que han dado como resultado la incautación de casi 10 millones de respiradores N95 de 3M falsificados.
Ya que muchas de las mascarillas falsificadas son fabricadas en el extranjero, HSI también está trabajando estrechamente con sus socios del orden público internacionales alrededor del mundo para darles seguimiento a pistas sobre fuentes de suministro y prevenir que envíos de productos falsificados lleguen a las costas de Estados Unidos.
Las pistas iniciales llegaron al Centro Nacional de Coordinación de Derechos de Propiedad Intelectual —encabezado por HSI— mediante 3M, la cual compartió denuncias sobre presuntas falsificaciones siendo compradas por hospitales y organizaciones gubernamentales. HSI se movilizó rápidamente, iniciando investigaciones multiestatales sobre los individuos y las organizaciones buscando beneficiarse financieramente de la venta y distribución de respiradores N95 falsificados.
Al mismo tiempo, HSI y 3M notificaron a aproximadamente 6,000 presuntas víctimas del fraude, en al menos 12 estados, incluyendo hospitales, instalaciones médicas y otros que pudieron haber comprado mascarillas médicas de vendedores ilícitos, exhortándoles que dejen de utilizar las mascarillas y contacten a HSI inmediatamente.
Desde diciembre de 2020, HSI ha iniciado más de una docena de investigaciones criminales, a través de Estados Unidos y en el extranjero, basándose en información recibida de 3M, sobre millones de mascarillas con respiradores N95 falsificadas siendo vendidas a instalaciones médicas y agencias gubernamentales para el uso de trabajadores de hospitales, personal de primera intervención y otros en todas partes del país. La Clínica de Cleveland (Cleveland Clinic) y la Asociación del Hospital Estatal de Washington (Washington State Hospital Association) son sólo dos de muchas organizaciones que han reportado haber recibido respiradores falsificados.
Las acciones investigativas de HSI se suman a los esfuerzos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza para identificar e interceptar estas falsificaciones en la frontera. La meta de HSI es extender la frontera e interceptar falsificaciones antes de que estas tengan una oportunidad para ingresar a Estados Unidos y poner a trabajadores de primera línea en riesgo.
HSI ha fortalecido su relación con 3M y su equipo contra el fraude mediante falsificación como parte de los esfuerzos de HSI lanzados bajo Operación Promesa Robada en abril. Debido a esta relación, 3M ofreció información que ayudó a HSI, la policía y al público a identificar respiradores 3M falsificados.
Operación Promesa Robada
HSI lanzó Operación Promesa Robada en abril de 2020 para proteger a los consumidores estadounidenses de la amenaza creciente y cambiante presentada por la pandemia. La operación involucra a varias agencias federales, incluyendo la CBP, la FBI, el Departamento de Justicia de EE. UU., el Servicio de Inspección Postal de EE. UU. la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU., el Servicio de Impuestos Internos de EE. UU. y múltiples socios del sector privado, incluyendo Pfizer, 3M, Amazon y otros.
Operación Promesa Robada combina la pericia de ICE HSI en investigaciones de comercio global, fraude financiero, operaciones internacionales e investigaciones cibernéticas para investigar esquemas de fraude financiero, la importación de fármacos y suministros médicos prohibidos, sitios web estafando a consumidores y cualquier otra actividad criminal asociada con el COVID-19 que puede que comprometa los sistemas legítimos de comercio y finanzas o ponga en peligro al público.
Para más información o para denunciar fraude relativo al COVID, visite la página web de Operación Promesa Robada.
HSI manteniendo la equidad en el comercio global: Investigando delitos de propiedad intelectual, fraude comercial y violaciones de controles de exportación
HSI protege los sistemas legítimos de comercio e industria al investigar delitos de propiedad intelectual, combatir el fraude comercial y prevenir la proliferación ilícita de tecnología sensible y armas estadounidenses.
Mediante el Centro Nacional de Coordinación de Derechos de Propiedad Intelectual (IPR, por sus siglas en inglés), HSI encabeza la respuesta del gobierno para investigar y prevenir violaciones de los derechos de propiedad intelectual, piratería digital, comercio ilícito y fraude de aduanas. Estos esfuerzos protegen a la industria y el consumidor estadounidenses, además de la seguridad del público estadounidense del impacto económico adverso y los peligros de salud presentados por la introducción de productos falsificados al comercio estadounidense.
El programa de investigaciones antiproliferación de HSI previene la adquisición y exportación ilícita de tecnología sensible y armas estadounidenses y la evasión de sanciones por parte de adversarios de Estados Unidos. La labor de HSI en esta área protege al combatiente estadounidense, avanza los intereses de defensa estratégica y protege la seguridad nacional de Estados Unidos.
HSI es una dirección general del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE, por sus siglas en inglés) y la rama investigativa principal del Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU., responsable de investigar delitos y amenazas transnacionales, específicamente aquellas organizaciones criminales que explotan la infraestructura global mediante la cual el comercio, los viajes y finanzas internacionales se mueven. La fuerza laboral de HSI de más de 10,400 empleados consta de más de 7,100 agentes especiales asignados a 220 ciudades a través de Estados Unidos y 80 localidades en el extranjero en 53 países. La presencia internacional de HSI representa la presencia policial investigativa más grande del DHS en el extranjero y una de las presencias internacionales más grandes del orden público estadounidense.