Uno de los extranjeros "más buscados" por ICE acusado formalmente por reingresar ilegalmente a los Estados Unidos tras su deportación
LOS ÁNGELES — Un nacional beliceño en la lista de los extranjeros sujetos a deportación más buscados del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) fue acusado formalmente en un tribunal federal el mes pasado de reingreso ilegal a los Estados Unidos tras su deportación —un delito grave.
Santos Moreira, 46, un ciudadano de Belice que se encuentra ilegalmente en los Estados Unidos, fue encontrado en el condado de Los Ángeles el 2 de noviembre de 2015, según una formulación de cargos contra este entregada el 25 de enero por un gran jurado federal.
El caso es el resultado de una investigación por parte de la Oficina de Detención y Deportación (ERO, por sus siglas en inglés) de ICE en Los Ángeles.
Moreira está siendo acusado de reingresar y permanecer en los Estados Unidos a sabiendas y voluntariamente sin haber obtenido permiso del fiscal general de los Estados Unidos ni el secretario de seguridad nacional para solicitar admisión a los Estados Unidos nuevamente tras su deportación.
Según la formulación de cargos, él fue deportado previamente en tres ocasiones separadas —en diciembre de 1995, septiembre de 1999 y octubre de 2010.
Los antecedentes penales de Moreira incluyen una condena del tribunal superior de Los Ángeles de 1991 por posesión de cocaína para su venta, por la cual él fue condenado a tres años en prisión y una condena del tribunal superior de Los Ángeles de 1992 por robo en segundo grado con un aumento de pena por utilizar personalmente un arma de fuego. Por ese delito, él fue condenado a cinco años en prisión estatal.
Moreira se encuentra encarcelado actualmente en una prisión estatal en Texas por una condena de 2018 relacionada con drogas. Se espera que él sea traído al tribunal federal de distrito para el distrito central de California para enfrentar el cargo federal de reingreso ilegal en los próximos meses. Si es condenado, él enfrenta una pena máxima prevista por la ley de 20 años en prisión federal.
Este asunto está siendo procesado por el fiscal federal auxiliar especial Kyle J. Ryan de la sección de delitos generales.